Atención estudiantes de Barcelona, aquí tenéis la fórmula mágica para aprobar un examen.
Actitud positiva, preparación, programación, redacción clara y organización del tiempo; es importante no aliñar nunca los ingredientes de esta fórmula con una pizca de nervios.
Actitud positiva: afronta los días previos a tus exámenes con positividad, si hace frio y te cuesta salir de tu acogedora residencia de estudiantes en Barcelona, conviértelo en algo positivo; este mal tiempo, te está ayudando a sobrellevar mejor las horas de estudio previas a ese examen final del primer semestre; estas estudiando y no pensando en los irresistibles planes que tienen tus amigos porque hace buen tiempo, ellos también están en casita calentitos como tú.
Programación: ¿ estás programando tu tiempo de estudio? Si no es así, no dejes de leer este artículo que escribimos “Organiza tu tiempo de forma eficaz” para asegurarte de estar optimizando las horas que están delante de tus apuntes. El esfuerzo y la dedicación que hacemos para aprobar un examen, debemos mantenerla desde que empieza el curso, hasta que termina, y no únicamente, estas semanas previas; si eres capaz de programar tu tiempo desde el primer día de clase, haciendo esquemas, resúmenes, y repasos semanales, será mucho más llevadero ahora y no tendrás que hacer un esfuerzo extra. La constancia en el estudio es clave para tener éxito.
Redacción clara: asegúrate de leer y comprender a la perfección las preguntas y si hay alguna que no te queda clara, pregunta rápidamente al profesor para que te lo deje claro, ¡ preguntar es de listos, no de tontos! Asegúrate de comprender lo que tienes que responder: demuestra, indica, explica, enumera, calcula…son cuestiones completamente diferentes, no expliques si te piden enumerar, no te van a valorar lo que no te están exigiendo; por lo tanto, responde adecuadamente, a aquellas que tienes claras, aunque, éstas, tengan una puntuación menor que aquellas que no te has preparado tan bien…si respondes dudando, probablemente llegues con dudas a las que mejor preparadas tienes también.
Organización del tiempo: calcula el tiempo que vas a tardar en responder a cada una de ellas, e intenta cumplirlo de forma estricta. Dejar una pregunta en blanco, denota que has segmentado tu estudio, y no has sido constante durante el curso. Es importante dejar unos diez minutos para repasar todo el examen y responder con líneas generales sin entrar en detalles a aquello que no tienes preparado para no dejarlo en blanco, a no ser, que lo que vayas a responder no sea correcto.
No descuides la presentación del examen, evita los tachones, la letra de médico y las faltas de ortografía.
Por último, respira profundamente y relájate. Los nervios no sirven de nada, al menos, no sirven para aprobar un examen.
¡Suerte!